El pasado 2 de agosto, los 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas acordaron una ambiciosa agenda compuesta por 17 nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), o metas mundiales, que trazarán la agenda de desarrollo hasta el año 2030. Los ODS reemplazan los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) establecidos en el 2000, los cuales obtuvieron resultados significativos en las áreas de la pobreza, la mejora del acceso al agua, el aumento en la asistencia a centros de educación primaria y la disminución de las tasas de mortalidad infantil. Sin embargo, al cierre del 2015 los líderes mundiales entienden que el trabajo de los ODM se quedó en gran parte sin terminar para millones de personas. Los nuevos ODS introducen nuevas dimensiones a la agenda de desarrollo; son metas más ambiciosas y están acompañados por 169 objetivos específicos destinados a promover los objetivos de manera concreta.
Sin lugar a dudas, los ODS presentan una oportunidad interesante para el sector privado para innovar y crear soluciones de negocios basadas en las necesidades y desafíos sociales. Es así que se pueden construir mercados, fortalecer las cadenas de suministro e incluso descubrir nuevas fuentes de rentabilidad. En Tropicalia hemos tenido esta forma de pensar desde el principio ya que la sostenibilidad ha sido clave en la toma de decisiones empresariales desde 2008. La Fundación Tropicalia, por ejemplo, genera valor tanto para nuestro negocio como para la comunidad local a través de la puesta en marcha de programas en educación, desarrollo económico, cultura y medioambiente.
Como miembros del Pacto Mundial de las Naciones Unidas desde 2010, entendemos la importancia de llevar la sostenibilidad en el corazón del negocio. De hecho, la nueva agenda de desarrollo presenta una gran oportunidad para innovar y crecer juntos con la comunidad de Miches.